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El viernes 12 de mayo del presente año, se informó respecto del abandono de una lactante, intoxicada con cocaína, de diez meses en una clínica privada de Estación Central, por parte de su madre. Situaciones que preocupan, y que requieren una modernización del sistema de protección de la infancia. Conmoción provocó en nuestro país, el abandono de un bebé por parte de su propia madre, quien ingirió una cantidad no determinada de cocaína, siendo su progenitora investigada por el personal policial a cargo. Al respecto, son preocupantes los índices de vulneración en Chile, tratándose de niños, niñas y adolescentes.  Ya en el año 2018, la UNICEF concluyó que en el país el 71% de nuestra infancia había recibido algún tipo de violencia por parte de algún familiar, situación que ocurre en todos los niveles socio económicos de nuestra sociedad. ¿Qué se está haciendo al respecto? ¿Se han impulsado políticas públicas eficientes a la luz de resguardar el interés superior de los niños en nuestro país? En este sentido, en octubre del año 2021, entró en vigencia la Ley Nº 21.302, que creó el Servicio Nacional Especializado de la Niñez y Adolescencia (Mejor Niñez), reemplazando un organismo totalmente deficiente en la esfera de protección de los niños, es decir, el SENAME, cuya protección suponía una intervención estatal una vez que se constataban las vulneraciones, o se encontraban bajo una “situación irregular”, no existiendo un sistema de prevención de estos hechos antes narrados. Con la creación de este nuevo sistema, se han impulsado nuevas políticas públicas en materias de infancia. Sin embargo, su implementación ha sido progresiva, existiendo todavía una serie de desafíos por lograr, como lo son: el aseguramiento de un presupuesto adecuado, la evaluación permanente de los programas, fiscalización efectiva, apoyo a las familias, el establecimiento de un sistema de protección alternativo al residencial, entre otros. Asimismo, se hace urgente reformar la ley de adopción en nuestro país, en aquellos casos donde la reinserción familiar se tornó imposible, de manera de hacer más rápidos los procesos y eliminando la discriminación a propósito de la prelación (reforma, que lleva muchos años discutiéndose en el Congreso, sin que sea una clara voluntad política de hacerla realidad). Por su parte, es necesario promover la figura de las familias de acogidas, reconocidas como una forma alternativa de cuidado, la cual es temporal, evitando así la figura de la institucionalización, la cual según estudios a largo plazo genera daños irreversibles en la salud mental de NNA.  Sin dudas, es alarmante el panorama respecto a las dinámicas de vulneración de derecho, tratándose de niños, niñas y adolescentes en nuestro país. Lo que exigió la modernización del organismo del SENAME. Pero nuestro sistema de protección de la infancia aún presenta una serie de deficiencias, las que merecen la implementación de nuevas políticas públicas centradas en el interés superior de los niños, evitando así que ocurran situaciones tan lamentables como la anteriormente narrada. Con todo, si eres testigo o víctima de hechos de vulneración, no dudes en denunciar dichas situaciones ante las entidades correspondientes, y contactarnos para poder brindarte la mejor asesoría, ya que contamos con abogados expertos en materias de infancia.