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  • 05 junio 2016

Consejos útiles para registrar una patente

A cualquier persona con una idea innovadora le preocupa que su idea pueda ser robada. Si tienes una idea que piensas podría cambiar el mundo y la industria a la que te dedicas, estos consejos podrían resultarte útiles, sólo procura adaptarlos a tu situación. Debido a este miedo mucha gente sobre reacciona dirigiéndose directamente a la oficina de registro, otros corren a la oficina del primer abogado que encuentran pensando que así sus solicitudes estarán a salvo. Más tarde descubren que los documentos que han presentado carecen de valor y que deben cancelar de nuevo los aranceles. Es una lección muy cara de aprender. Las patentes son de los registros más costosos. Igualmente cuando se lleva tiempo en esta área no sólo se aprende a registrar correctamente de acuerdo, a la ley sino lo valiosas que terminan siendo para cualquier empresa o inventor independiente. Además que no registrarlas y proteger nuestra propiedad industrial muchas veces termina resultando más caro que hacerlo. Va a haber un montón de gente que te diga que lo primero que debes hacer es presentar una patente, amigos, familia, las personas que no tienen ninguna experiencia real de llevar los productos al mercado. La presentación de una patente no es la primera cosa que debes hacer. Alrededor del 97 por ciento de todas las patentes no generan suficientes ingresos para pagarse por sí mismas. Realmente deja que se hunda con ellas. Aunque la realidad es bastante obvia a veces es posible que desees ir en contra de la convención sobre éste tema. Así es cómo puedes hacerlo. 1. Determinar si tu idea es comercializable. INAPI ofrece un período de gracia de doce meses por ‘divulgación inocua’, como una de las bases para obtener una patente es la confidencialidad de la información. Esto no significa que vas a publicar tu invención en Internet o a divulgar a los cuatro vientos, lo cual noes nada aconsejable. Pero podrías acordar posibles reuniones bajo contrato de confidencialidad con posibles inversionistas, no tienes que revelar todos los detalles, en especial aquellos delicados, pero su visión podría ayudarte a determinar si tu invención puede ser rentable ono antes de solicitarla. Si te das prisa y presentas una solicitud de patente de inmediato, casi puedo garantizar que vas a perder algo. Y como resultado, tendrás que presentar una nueva solicitud. La clave para escribir una fuerte propiedad industrial, propiedad que en realidad tiene valor, es convertirse en un experto, en primer lugar. No en un experto en propiedad industrial en general, pero en su concepto. Es necesario que dediques un tiempo a estudiar la condición de la protección de patentes para realizar investigaciones más críticas, incluso en la fase de desarrollo de la invención en sí. Vamos a retroceder un poco. Antes de presentar una solicitud, haz lo necesario para estudiar el mercado, al cual en última instancia va dirigida la invención. 2. Llevar a cabo una búsqueda de la técnica. Son útiles las patentes de Google. Busca las patentes que son similares a tu idea. Algunas pueden incluso ser lo mismo que tu idea. Esto parece muy complicado al principio pero no te dejes intimidar. Hay clases que puedes tomar en línea para aprender a buscar patentes. Oblígate a seguir leyendo. Si una patente que te confunde, no te culpes. Existe una buena probabilidad de que pueda confundir a un juez y a un jurado, así, que no es un buen augurio para la fuerza de esa patente. Las mejores patentes están claramente escritas y, en términos relativos, fáciles de entender. Excavar a través de la técnica anterior, adoptar la mentalidad de un detective. Mira los dibujos primero para determinar rápidamente la relevancia de la patente en cuestión. Cómo ha evolucionado la categoría con el tiempo? Quien ha afirmado que? Qué falta? Tu trabajo consiste en descubrir la historia de la innovación en lo que respecta a la categoría. Cuando lo hagas, te vuelves un conocedor de la singularidad de tu invención, que es fundamental para escribir una patente fuerte. Encontrarás invenciones similares. No te asustes. Peina a través de lo que encuentras con mucho cuidado. Cuando se me ocurrió la idea de una etiqueta giratoria hace muchos años, finalmente descubrí que no era la primera. La idea ya había sido patentada hace unos 60 años. Al principio estaba devastado. Pero cuando pensé, analicé en cómo la idea no estaba en el mercado. Por qué no? A medida que leía de cerca el estado de la técnica, me di cuenta de lo mucho que se había dejado afuera. Por ejemplo, no se hicieron referencias a los métodos de fabricación. Yo era capaz de presentar una solicitud de registro después de todo. He estado recibiendo ingresos pasivos, también conocidos como regalías, por una idea a la que ni siquiera he vuelto en los últimos 20 años como resultado. 3. Busca en Google Imágenes por ideas similares. Tómate tu tiempo. Qué más hay? Es única tu invención? No necesita ser radicalmente, enormemente diferente; pequeñas mejoras pueden ser patentadas. Si, después de buscar a fondo, concluyes que de hecho has inventado algo único, es el momento de presentar una solicitud de patente. Incluir tantas variaciones como puedas imaginar. En otras palabras, se corta el paso a competidores potenciales al tratar de robar la idea por ti mismo. Mi otra gran pieza de consejo es incluir una gran cantidad de dibujos. Pueden ser simples y de líneas claras. Dibujos valen más que mil palabras. Después de presentar, iniciar contacto con las empresas que crees pueden estar interesadas en licenciar tu idea. Tu objetivo final es obtener información. Ir a ferias comerciales. Obtener las cotizaciones de los fabricantes por contrato. Recuerda, la mayoría de las innovaciones patentadas nunca llegan al mercado, ya que no se desea o no se pueden hacer. Después de descubrir más acerca de la categoría y la comercialización de tu invención, es posible que tengas que presentar otra solicitud de patente para otras partes que es necesario proteger. No hay problema: Se pueden combinar múltiples aplicaciones más adelante. Después de convertirte en un experto, si estás aún más convencido de que la idea es comercializable y todavía quieres seguir adelante con ella, entonces debes contratar a un abogado de patentes para ayudar a presentar una. Puedes participar escribiendo la solicitud en los aspectos técnicos, pero el documento final debe estar a cargo del abogado de patentes. Verifica que te halles frente a una verdadero especialista y no cualquier abogado. La información que se reúna, mientras que tu idea es patente pendiente será inestimable para tu abogado. Tal vez has desarrollado un prototipo. Por lo menos debes saber acerca de los métodos de fabricación. Como resultado de ello, tu abogado será capaz de redactar una solicitud que realmente tiene valor. Por favor, no esperes que tu abogado de patentes haga este tipo de investigación de fondo. Ese no es su trabajo. Si tienes una gran idea, tendrás que crear una pared de propiedad intelectual para defenderla eficazmente. Tener una estrategia en su lugar antes de empezar a trabajar en ello. En resumen, no te precipites y llegues a presentar una patente por miedo. Haz tu tarea para que puedas elaborar un plan bien pensado. No sólo para obtener una patente, que es bastante fácil de hacer, sino para beneficio de tu creatividad, lo que estoy asumiendo es lo que quieres hacer. Ser capaz de presentar una patente es una ventaja increíble. Haz tu mejor esfuerzo. Así cuando tengas que enfrentar los exámenes periciales y reivindicaciones tu patente tendrá más fuerza. Cómo hacer la búsqueda Con los años, he oído innumerables inventores presentar sus productos como la solución innovadora y revolucionaria, nunca antes inventada, única en su especie, todo el mundo necesita, pero sólo si el inventor puede permitirse el lujo de presentar una solicitud de patente, la adquisición de las cuales es vista como el único objetivo para garantizar el éxito. La obtención de una patente no es una mala idea, pero la fijación en el objetivo a veces lleva a los inventores a omitir el paso precursor fundamental de llevar a cabo una búsqueda de patentes. Es fundamental para evaluar primero la probabilidad de éxito antes de solicitar una patente. La presentación de la solicitud no garantiza necesariamente que INAPI emitirá la patente, lo que desperdicia una gran cantidad de tiempo, esfuerzo y dinero. Para los inventores independientes, en particular, este esfuerzo puede ser particularmente impactante. Cualquier persona que considera la presentación de una patente debe hacer una búsqueda exhaustiva de patentes para determinar si la invención es realmente única en su especie e identificar cualquier problema antes de presentar la solicitud INAPI. De acuerdo con IP Watchdog, un blog de la ley de propiedad intelectual, los buscadores de patentes profesionales y abogados pueden cobrar más de $ 3,000 USD para una búsqueda de patentes y un estudio de patentabilidad. Inventores que trabajan con un presupuesto fijo deben considerar opciones más asequibles. INAPI y WIPO (organismo internacional) ofrecen un excelente tutorial web sobre cómo llevar a cabo una búsqueda de patentes preliminar a la solicitud. Otra opción es la herramienta de búsqueda de patentes disponible de Búsqueda FreePatentsOnline IP. Los resultados por lugar de palabras clave vs la técnica anterior identificada. Esta opción de búsqueda libre permite a un inventor descubrir rápidamente posibles patentes relacionadas ya presentadas. Aunque siempre es preferible trabajar a través de un investigador profesional de patentes, esta herramienta es un primer paso rentable. Para el inventor que no se siente cómodo de realizar su propia búsqueda de patentes, una firma de búsqueda de patentes de buena reputación es una buena opción. Algunas firmas ofrecen búsquedas de patentes asequibles. Por un promedio de 100$ USD una firma especializada investigará tanto las patentes nacionales como extranjeras, y proporcionará una opinión de patentabilidad realizada por un abogado especialista . Esto es muy valioso para los inventores con un presupuesto fijo en la necesidad de una opinión profesional e independiente sobre la conveniencia de seguir adelante con una patente. Hace unos años mi madre consideró la presentación de una patente sobre un producto de salud para resolver un problema que a menudo vio con sus pacientes de edad avanzada. Trabajando a través de búsqueda de patentes internacional, descubrió la técnica anterior presentada en un producto muy similar. El abogado de propiedad industrial llegó a la conclusión de que mi madre no debía perseguir la patente. Ella estaba decepcionada a fondo por los resultados, pero, al darse cuenta de la profundidad de la investigación que se llevó a cabo, ella estuvo de acuerdo (a regañadientes) con el experto independiente. La determinación de la viabilidad de una patente no tiene por qué ser costosa si estás dispuesto a dar un paso atrás y llevar a cabo algunas investigaciones iniciales y críticas antes de invertir por ti mismo profundamente en el proceso de solicitud de patente. Convertir una idea una en realidad puede requerir una inversión inicial considerable, encontrar la manera de patentar una invención, hacer un prototipo y luego encontrar un fabricante para llevar a cabo esa prototipo al mercado por lo general no es barato. Por eso es tan importante tener un sólido conocimiento del proceso antes de embarcarse. Comenzar con la protección de tu invención patentándola es un proceso riesgoso como hemos visto, pero también no hacer lo suficiente por protegerla o divulgarla antes de tiempo. Lo que se recomienda entonces es elaborar un prototipo en confidencialidad y realizar una búsqueda de la técnica anterior. Esto no sólo protegerá tu idea al mostrarla a los inversores (recordar el acuerdo de confidencialidad), sino que te ayudará a decidir si tu producto merece la pena en primer lugar. Después de la patentes, viene la mejora de los prototipos (para lo cual es probable que tengas que contratar a un diseñador profesional) seguido de encontrar el fabricante correcto para producir en serie, posiblemente la parte más importante y estresante del proceso. Al final el proceso de protección habrá valido la pena y si, por alguna razón, tu producto no es patentable, habrás mejorado tus conocimientos en propiedad industrial y aprendido lo suficiente para un próximo proceso de aplicación. ¡Suerte!

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